Si tiene la corazonada o la certeza de que su familiar fallecido tenía un seguro de vida y no lo encuentra, existe la forma de reclamarlo.
Por extraño que parezca, hay personas que fallecen sin comunicarle a sus seres queridos que están pagando una póliza de seguro de vida cuyos beneficiarios son ellos. Las causas de ese gran descuido pueden ser diversas: el fallecido era muy joven y murió en un accidente repentino antes de comunicárselo a la familia. Hay personas que les cuesta conversar sobre esos asuntos con sus parejas o simplemente, están tan ocupados en tantas cosas que se le pasó hablar del tema.
La realidad es que, si el familiar fallece, el ser querido sobreviviente le puede surgir la duda sobre la existencia de un seguro de vida. Sobre todo, después de enfrentar los altos pagos de funeraria y entierro o cuando tenga que afrontar solo lo que antes se abonaba compartido o directamente era saldado por el fallecido.
Las primeras pistas las puedes obtener en los pagos del banco. Si existe algún pago a una compañía de seguro podría ser un indicio. La otra forma es buscar entre sus papeles importantes un contrato de seguro de vida. Si no se tiene éxito en la búsqueda, entonces se puede recurrir en internet a webs especializadas en buscar de forma gratuita pólizas de vida no pagadas de personas fallecidas.
Para evitar este dolor de cabeza, siempre es mejor conversar con la pareja sobre la existencia de un seguro de vida que le ayudará financieramente en caso de su fallecimiento. Además de hablar, debe darle acceso a los documentos para que tenga claro la forma de reclamar el beneficio de fallecimiento. Tenga en cuenta que usted no va a estar ahí para ayudarle.